¿HAY ALGUNA RELACIÓN ENTRE LA SUERTE Y EL ÉXITO?

Expresiones como las anteriores, asignan poderes un tanto exagerados a la suerte y quitan de nuestros hombros una responsabilidad que para muchas personas suele pesar demasiado: la responsabilidad personal por nuestro propio éxito y felicidad.

Hay dos posiciones muy claras al respecto: la de aquellos que afirman que las palabras “suerte” y “triunfo” no tienen cabida en la misma frase. Ellos se jactan de utilizar como lema personal aquella célebre oración que dice: “Yo sí creo en la suerte; cuanto más trabajo, más suerte tengo”, queriendo decir que la fuente del éxito es el trabajo duro y no la suerte.

La otra postura es la de quienes afirman que la suerte es la única que determina el éxito de las personas. Ellos consideran que en la vida hay algunos afortunados que nacen con buena estrella, mientras que la gran mayoría, infortunadamente, nace sin ella.

Esta postura tiene mucho de conveniencia: qué mejor que culpar por nuestros fracasos al destino. Él no está ahí para defenderse.

La persona mediocre afirma: ¿Para qué preocuparse tanto por fijar metas, si lo que es para uno es para uno? Quien desea culpar al destino por sus desventuras, puede estar seguro que encontrará una excusa que le satisfaga y aliados que la compartan. No obstante, el mayor problema al señalar a las circunstancias externas como las responsables de nuestros fracasos, es que hacerlo no soluciona los problemas y tampoco nos lleva más cerca de la realización de nuestras metas.

La falta de suerte es una de las excusas más comunes entre los fracasados. Pero, al igual que con cualquier excusa, ésta no produce soluciones reales y sólo sirve para tranquilizar a la persona que la está dando.

Entonces, ¿existe alguna relación entre la suerte y el éxito? Norman Vincent Peale afirmaba que “La suerte es el cruce de caminos donde la búsqueda se encuentra con la oportunidad”. En otras palabras, para que la suerte exista, deben darse dos elementos básicos al tiempo: la búsqueda y la oportunidad.

La buena noticia es que todos y cada uno de nosotros tenemos la posibilidad de hacer coincidir estos dos elementos.

Por un lado, debemos mantener un estado de búsqueda constante por todo aquello que nos pueda ayudar a triunfar y, por otro, debemos encargarnos de crear las oportunidades que nos acerquen a la realización de nuestras metas. Esta es la fuente de la suerte y está en tus manos.


Por: Dr. Camilo Cruz.